Centro JLL
Este edificio ejemplifica la regeneración urbana. La forma del sitio es el resultado típico de una época en la que se demolían edificios para reemplazarlos por estacionamientos, los cuales se ubicaban entre los edificios subsistentes.
El proyecto tiene múltiples usos que se expresan como un distrito prismático vertical. El volumen frontal está suspendido sobre los edificios inferiores existentes y alberga el hotel de 176 habitaciones. La parte interior del bloque se abre hacia el cielo. Esto permite que la luz llegue a las habitaciones que se encuentran en la mitad del bloque y crea un espectacular ventanal urbano hacia la plaza. El jardín puede observarse desde todas las habitaciones que lo rodean y funciona como un espacio para eventos al aire libre que da al centro de Pittsburgh. Debajo, hay un segundo volumen más delgado con el restaurante del hotel que también da a la plaza. El espacio que queda es ocupado por el piso que alberga las salas de reuniones.
Detrás de este volumen más bajo, hay dos volúmenes adicionales. Uno contiene el garaje de varios niveles y sobre el garaje hay un segundo volumen cúbico que es el edificio de oficinas. Todos los volúmenes levitan sobre una base transparente de tiendas que bordean la acera. Las tiendas solo se ven interrumpidas por los vestíbulos de las oficinas y el hotel. El ingreso al garaje es por el pasaje ubicado entre los edificios existentes y los nuevos, y desde la calle trasera.
