Museo de las Artes del Bronx

El diseño de la primera fase de Arquitectonica surge de la acera como una pantalla plegada irregular hecha de vidrio fritado y paneles metálicos. El panelizado en componentes diagonales pone énfasis en la profundidad de las grietas. Las zonas verticales resultantes de metal y vidrio forman ángulos y se retuercen como un origami arquitectónico que desmitifica la pared a la calle y la vuelve permeable. Es posible echar un vistazo a la galería comunitaria de la planta baja a través de las astillas de vidrio semitransparente enfrente de los peatones que se acercan en su posición diagonal. Esta geometría similar a una cortina dramatiza la dimensión vertical de una estructura por lo demás modesta y la convierte en una superficie inesperadamente monumental. La falta de expresión de los niveles interiores hace que la fachada parezca carente de escala, lo que le da una interpretación gráfica y audaz del enfoque de distancias largas y abiertas, una estrategia característica del trabajo de Arquitectonica.